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Conflicto sirio podría desencadenar guerra con China y Rusia

Dominique de Kevelioc de Bailleul de Beacon Equity Research predice que el conflicto sirio podría desencadenar la destrucción del dólar estadounidense. Una acción militar contra Siria e Irán podría acarrear la respuesta de Rusia y China, advierte, resultando en una conflagración del mundo, no vista desde la Segunda Guerra Mundial.

“Comentarios al estilo de la Guerra Fría, emitidos en la conferencia ‘Amigos de Siria’ en París por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, hacia Rusia y China, sugieren fuertemente que una confrontación entre ex rivales de la Guerra Fría, incluyendo ahora a China, está encendida”, escribe. “El precio: petróleo – y por sus implicancias, el futuro del estándar del petrodólar estadounidense y la forma de vida americana”.

El viernes pasado, durante una reunión con el Ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Laurent Fabius, y Amigos del Pueblo Sirio (una organización creada por Nicholas Sarkozy), Clinton exigió que China y Rusia paguen el precio de no apoyar una acción militar contra Siria y su líder, Bashar al-Assad. Rusia y China están “reteniendo el progreso y bloqueándolo”, insistió la secretaria de Estado.

La oposición siria usó la reunión en París para pedir una “zona de exclusión aérea” en Siria, ante lo cual Rusia se opone. Una zona de exclusión aérea similar en Libia, el año pasado, anunciada por el líder del Estado Mayor Conjunto, Mike Mullen, fue usada para atacar al país norafricano con misiles de crucero Tomahawk e impactar instalaciones de defensa aérea, tanques y artillería.

Al menos 30 mil personas fueron asesinadas y otras 50 mil heridas como resultado del bombardeo de la OTAN, y ataques de rebeldes armados por Estados Unidos, incluyendo miembros de Al Qaeda.

En noviembre, Paul Joseph Watson de Prison Planet escribió que “los mismos terroristas de Al Qaeda que combatieron contra tropas estadounidenses en Irak, y ayudaron a la OTAN a derrocar al Coronel Gaddafi, están siendo trasladados ahora a Siria para asistir a los rebeldes en el derrocamiento del presidente Bashar al-Assad.”

También en noviembre, un importante periódico turco, el Milliyet, reportó que Francia había enviado a sus entrenadores militares a Turquía y el Líbano para asistir al llamado Ejército Libre de Siria (FSA, por sus siglas en inglés). El FSA es apoyado por la inteligencia británica a través de la Hermandad Musulmana, y el Consejo Nacional de Transición de Libia infestado con miembros de Al Qaeda.

Para que el ataque coordinado funcione, deponga a al-Assad y acuerde un gobierno inclinado hacia la élite bancaria, Rusia y China deberán ser persuadidos para abandonar su dura oposición.

La secretaria de Estado de EE.UU. acusó a Rusia, China e Irán de apoyar económica y militarmente al régimen de al-Assad, pidiendo a otras naciones que consientan con las sanciones de la ONU impuestas a Siria – sanciones que también podrían incluir el bloqueo de envíos de petróleo del confiable aliado de Siria y vital apoyo económico, Irán. Pero para que las continuas sanciones contra Siria sean efectivas, “la mayoría (de ellas) dependerá de persuadir a dos poderes reluctantes [Rusia y China] para que presionen a Assad hacia la acción [de un cambio de régimen pacífico en Siria]”, según CBCNews de Canadá.

Aunque Rusia y China ya están de acuerdo con una resolución pacífica a la guerra civil siria, habiendo firmado el plan del Consejo de Seguridad elaborado por el ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, es más probable que Moscú y Beijing estén jugando a la política de la cooperación para dar más tiempo al régimen de Assad. Rusia y China no quieren un cambio de régimen en otro país de Medio Oriente debido a un conjunto de razones económicas y políticas, de las cuales la principal es impedir que Estados Unidos controle el suministro petrolífero de la región al aliado de Rusia, y miembro co-fundador de la Organización de Cooperación de Shanghai (SCO), China

Dominique de Kevelioc de Bailleul cita a los autores John Barry y Dan Ephron, quienes recalcaron en 2004, durante el esplendor del control neoconservador del Pentágono, el rol central de Siria en planes para desestabilizar y derrocar a regímenes desfavorables en Medio Oriente.

“Siria e Irán han sido objetivos del interés de Estados Unidos por mucho tiempo, ya que Washington, bajo la administración de George W. Bush, sabía que llegaría un día en que Estados Unidos y China se golpearían las cabezas por los preciados suministros de crudo en Medio Oriente”, escribe Kevelioc de Bailleul.

A pesar del riesgo que existe, de descabezar finalmente la hegemonía del dólar estadounidense y destruir el dominio del petrodólar, Obama y Clinton (y, si es elegido, Romney y su virulento clan de neconservadores) están decididos en impulsar una jugada final con Siria (que posee 325 tropas militares activas) e Irán (con el noveno ejército más grande del mundo, de 523 mil tropas activas).

“Ya sea el dólar estadounidense resiste temporalmente una guerra total contra los enemigos más formidables desde el eje Alemania-Japón-Italia de la Segunda Guerra Mundial, o no lo hace”, concluye Dominique de Kevelioc de Bailleul. “Pero al final, las probabilidades favorecen fuertemente un abandono del dólar como la primera moneda de reserva del mundo (…) El acondicionamiento de la población estadounidense a esperar un gobierno de mano dura sigue sin control y respuesta del Congreso, ya que internamente Washington sabe que los días del dólar están contados – y podría estar bien cerca del día en que se produzca el próximo conflicto militar programado en Medio Oriente”.

2 comentarios
  • Anónimo
    4 agosto 2012 at 8:35 pm -

    guerra bueno tarde o tempranotenia que desatarse esa guerra aver q pasa

  • Anónimo
    14 septiembre 2012 at 4:56 pm -

    Todo lo que hablan es correcto si esto no es ninguna novedad lean la palabra, todo esta escrito en la biblia estamos viviendo en los postreros dias y todo esto se tiene que dar y despues todos hablaran de paz entoces vendra el arrebatamiento