Paquistaní perseguido por Hinzpeter: Descenlace de caso bombas «recuerda injusticia en mi contra»
Saif Khan, el protagonista del bullado caso paquistaní, conversó en exclusiva con este medio y aseguró que la absolución de los imputados por el caso bombas deja en evidencia otra grave injusticia.
A una semana de que el Tercer Tribunal Oral decretara la absolución de los 6 imputados por la colocación de artefactos explosivos en Santiago, en el marco del denominado caso bombas, la prensa se ha convertido en el escenario de fuertes cuestionamientos a la labor investigativa del Ministerio Público y los aparatos de inteligencia del Estado.
El viernes pasado, el presidente de la Asociación Nacional de Fiscales, Pedro Orthusteguy, solicitó directamente a Piñera evaluar la continuidad del ex fiscal Peña en el gobierno, pidiendo su renuncia del cargo que hasta la fecha mantiene en la División de Estudios del Ministerio del Interior. Como quedó demostrado por un sumario interno filtrado a la prensa, el Ministerio Público reprochó la conducta del ex fiscal por aceptar la oferta laboral del gobierno mientras encabezaba la investigación del caso bombas.
Durante sus funciones en el Ministerio Público, Peña no sólo estuvo a cargo de la investigación del caso bombas. Su primer fracaso como nueva estrella de la Fiscalía, fue el llamado caso paquistaní.
En mayo de 2010, Khan fue acusado públicamente por el ministro Hinzpeter como parte de una asociación ilícita islámica que buscaba, presuntamente, cometer actos terroristas en el país. Luego de casi siete meses de persecución penal, encabezada desde la Fiscalía por el ex fiscal Alejandro Peña, el Ministerio Público desistió en continuar su investigación por falta de pruebas que justificaran la tesis sostenida por el gobierno.
“El caso bombas, o bromas, no es el único montaje que se hizo”, comenta Saif Khan desde Pakistán. “Ellos también lo hicieron conmigo. Esto (la absolución) demuestra que Hinzpeter y Peña fueron los responsables desde un principio”.
El proceso estuvo plagado de inconsistencias. Las primeras acusaciones emanaron de la embajada de Estados Unidos, cuyas máquinas detectoras de explosivos se encendieron cuando Khan concurrió a la sede diplomática para un confuso chequeo de identidad, a petición del cónsul William Whitaker. Según la versión oficial, los aparatos del consulado detectaron trazas de tetryl y TNT en las pertenencias del paquistaní. Lo anterior llevó a Hinzpeter a emprender, personalmente, una acción judicial por la Ley Antiterrorista, declarando en los medios de comunicación que existían antecedentes sobre vinculaciones con células terroristas islámicas, como Al Qaeda, que estaban operando “incipientemente” en Chile.
Como expresó en su momento el abogado defensor de la causa, Gabriel Carrión, pericias de Carabineros comprobaron en la escena que el joven paquistaní, una vez dentro del consulado, tenía sus manos limpias. En otras palabras, los peritajes arrojaron resultados negativos a la presencia de los químicos mencionados.
En la querella de Hinzpeter, se expresan acusaciones infundadas como la detonación de una bomba real en las dependencias de la embajada estadounidense, situación de la cual nunca se habló.
El allanamiento del FBI
Lo anterior se suma a los irregulares procedimientos dirigidos por la Policía de Investigaciones (PDI), que recibió órdenes de Estados Unidos, a través del jefe del FBI en Chile, Stanley Stoy, para allanar la vivienda transitoria del joven paquistaní, mientras éste aún se encontraba secuestrado en la embajada por personal de la empresa Inter-Con Security Systems (de origen israelí).
Las órdenes dictadas por el FBI a los funcionarios de Investigaciones, quedaron al descubierto con la declaración del subcomisario encargado del allanamiento, Sergio Leal Villarroel, quien reconoció haber recibido una llamada personal de Stoy con respecto al incidente de Khan en la embajada.
Paradójicamente, los tres detectives que participaron del procedimiento fueron fotografiados e identificados por funcionarios de la Dirección de Inteligencia de Carabineros (Dipolcar), según queda constancia en un informe reservado (ver documento). No fue sino después de este irregular allanamiento que trazas de explosivos fueron detectadas en la pensión donde se alojaba el ciudadano extranjero.
Tanto Stanley Stoy, jefe del FBI en Chile, como Paul Simons, entonces embajador de Estados Unidos en el país, abandonaron territorio chileno durante la investigación del caso.
“Como lo dije antes, lo diré de nuevo: Hinzpeter no trabaja para Chile”, enfatizó Saif Khan. “En mi caso, no sólo la credibilidad de él estuvo en riesgo, sino la de sus superiores”.
¿Caso bombas o caso paquistaní?
Desde un primer momento existieron intentos claros de vincular, a nivel investigativo, el caso bombas con el caso paquistaní. De esto queda constancia en una publicación de El Mercurio, del 7 de agosto de 2010 (siete días antes de la captura de los 14 chilenos ya absueltos por la justicia en el caso bombas), que mencionó una reunión entre Rodrigo Hinzpeter y Alejandro Peña:
“Sabas Chahuán, descartó que se pueda dañar la independencia del Ministerio Público porque un ministro de Estado se reúna con un fiscal de este ministerio. Esto, a raíz de la reunión sostenida el jueves por el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, con el fiscal Alejandro Peña, a cargo del caso Bombas, para tratar la eventual relación del joven paquistaní Mohamed Saif Ur Rehman Khan“.
Como explica Rubén Jerez Atenas, abogado de DDHH de la CUT, el informe reservado de la Dirección de Inteligencia de Carabineros (Dipolcar) Nº 288, traza vinculaciones entre Saif Khan, Pablo Morales del caso bombas (sobreseído en febrero), y el Grupo Lautaro. Tal información nunca pudo corroborarse en el proceso, y finalmente fue desestimada.
Actualmente, Saif Khan estudia un curso de Relaciones Internacionales en Pakistán, y al momento de esta breve conversación con Panoramas News, acababa de rendir un examen de análisis sobre Política Exterior.
“Me puse feliz cuando vi salir libres a esas personas”, comenta, en referencia a los ex imputados del caso bombas. “Se me llenaron los ojos de lágrimas cuando vi la felicidad en ese tribunal. Este acontecimiento me hace recordar la injusticia que viví.”
En diciembre de 2011, Khan expresó al sitio Verdad Ahora su deseo de llevar al ministro Hinzpeter ante la justicia cuando deje su cargo en el gobierno. “Hinzpeter es alguien perverso. No trabaja para Chile”, puntualizó.
Trabaja para intereses privados como un verdadero sicario,es un criminal como la mayoria de su coalicion de gobierno y la oposicion tambien es de la misma naturaleza corrupta difiere solo en el papel pero de hecho es lo mismo y peor.
HINZPETER MUST DIE, SOON…….SO SOON….
oye no generes más ese tipo de odio y menos en tu corazón, de ké te serviría muerto ?? No devolvería ni una sola vida.
Pedir su renuncia sería lo mejor.
Destitución a hinzpeter y al resto de los políticos gobernantes sus caídas seran inminente.
Que así sea.