Andrónico Luksic, otro obstáculo para el desarrollo de Aysén
Junto a otros chilenos y extranjeros, el magnate se une a la larga lista de “conservacionistas” que poseen amplias hectáreas en el sur de Chile.
Como una forma de adherirse a las movilizaciones que se han producido en Aysén, más de una treintena de pobladores de Villa O’Higgins se tomaron el jueves la pista de aterrizaje de la localidad, ubicada cerca de la frontera con Argentina. La acción obstruyó el paso del avión privado de Andrónico Luksic cuando deseaba despegar del fundo Las Margaritas, donde posee una casa de descanso.
¿Una simple estancia de veraneo? Pues no. Los proyectos del empresario en la Región de Aysén son vastos. Hoy, la empresa Las Margaritas de Luksic postula a una concesión de más de 12 mil hectáreas en Villa O’Higgins, las cuales se sumarían a las existentes 37 mil hectáreas de terreno bajo su control.
En diciembre de 2009, los predios habían sido originalmente destinados a “la protección y conservación del hábitat del huemul” por el Ministerio de Bienes Nacionales. Pero la familia Luksic no se hizo esperar: rápidamente, el grupo postuló a una concesión por 50 años de los terrenos, la cual integra una opción de compra del predio Río Azul, para desarrollar un proyecto privado de “conservacionismo ecológico”.
“Es un proyecto aprobado por el Gobierno Regional y es una solicitud de uso oneroso, es decir, él (Luksic) va a pagar por esta concesión”, expresó la ministra de Bienes Nacionales, Catalina Parrot, a mediados de 2011.
En tanto, la comunidad de O’Higgins y sus alrededores señala que las autoridades no han considerado su postura sobre la cuestionable transferencia de terrenos fiscales, expresando oposición al acopio de tierras en manos privadas.
En junio de 2011, El Divisadero informó: “Patricio Ulloa Georgia, alcalde de Cochrane y presidente de la Asociación Municipal Pascua Baker, indicó que existe preocupación por la adquisición de grandes extensiones de terrenos por parte de empresarios en la Provincia Capitán Prat”.
Ulloa no ha sido el único que se ha manifestado negativamente ante la vasta compra de hectáreas en el sur austral. En un reportaje de El Mostrador, publicado en octubre de 2009 y titulado “El proyecto conservacionista del empresario Andrónico Luksic en Villa O’Higgins”, el edil de esta localidad, José Fica Gómez, declaró: “se está perdiendo la producción ganadera, que era el sustento de la gente”.
“Dejan adentro los lagos y otros atractivos, como glaciares donde se practica trecking y cabalgatas. No está claro si las servidumbres, que hoy están abiertas, se mantengan en el tiempo”, indicó además el microempresario turístico Hans Silva.
El entonces presidente de la Junta de Vecinos de Villa O’Higgins, René Guzmán, también manifestó su descontento. Es más, sus palabras reflejaron un profundo abandono por parte del gobierno central. “La gente le está vendiendo a los Luksic porque ya no puede vivir de la cosa ganadera”, reveló el poblador. “Los pocos que viven acá lo hacen con poco capital y con los pequeños aportes que el gobierno les da a través de Indap, que son migajas. Por eso la gente está vendiendo sus terrenos. Los ganaderos ya no pueden vivir”.
Pero la extensa adquisición de territorio en manos privadas siempre se disfraza de benevolencia. Las iniciativas de Luksic han sido reconocidas por otros “conservacionistas”, como la esposa del estadounidense Douglas Tompkins. En una entrevista de noviembre de 2011 con Moon, Kristine McDivitt Tompkins señaló: “Andrónico Luksic tiene un lugar en Villa O’Higgins, el que considera un proyecto de conservación”.
La ecologista que ayudó a crear el Parque Pumalín, de 325.000 hectáreas en el sur de Chile, también aprovechó el momento para alabar el proyecto Tantauco de Sebastián Piñera, ignorando el conflicto territorial que aún se mantiene entre el mandatario y las comunidades huilliche de Chiloé.
La historia es la misma: personas poderosas adquiriendo terrenos con recursos naturales valiosísimos para el país.
La imagen de Luksic habla por sí sola. El magnate es propietario del Banco de Chile, Canal 13, Luchetti, Shell y otras empresas. En el rubro de la minería, Andrónico Luksic controla Antofagasta Minerals y forma parte del Consejo Asesor de la transnacional Barrick Gold. El empresario de origen croata también es miembro de la Comisión Trilateral, think-tank supervisado por David Rockefeller, y el Council of the Americas, fundado por el mismo banquero para impulsar tratados de libre comercio en América Latina.
A los círculos de élite que frecuenta, se suma la organización ambientalista The Nature Conservancy, co-presidida por el ex director ejecutivo de Goldman Sachs y anterior secretario del Tesoro estadounidense, Henry Paulson.
En septiembre del año pasado, la organización anunció la integración de Andrónico Luksic, Ricardo Lagos y Álvaro Saieh, al Consejo de Conservación para América Latina. Durante una cumbre en Ciudad de México, Paulson declaró a los medios: “Es claro que ha llegado el momento de comenzar a utilizar un enfoque verdaderamente panregional en cuanto a la sostenibilidad, y asegurar así el bienestar de los bosques, pastizales, ríos y océanos que sostienen la vida y las economías de la gente de la región. El Consejo será una voz que guiará las acciones para enfrentar estos desafíos.”
No deja de sorprender que la gran mayoría de los esfuerzos “conservacionistas” en la Patagonia estén encabezados por figuras ligadas a la banca internacional. Ante esto debemos recordar que Goldman Sachs ya posee 270 mil hectáreas en Tierra del Fuego, las cuales administra junto a la ONG Wildlife Conservation Society.