Candidato republicano insinúa que Henry Kissinger podría ser parte de su administración

El candidato presidencial republicano, Herman Cain, ha pedido al globalista Henry Kissinger que se una a su eventual administración, pero el ex Secretario de Estado declinó a la solicitud del ex director de la Reserva Federal de Kansas.

“El Dr. Kissinger declinó a mi oferta para ser secretario de estado”, contó Cain. “Dice que está perfectamente feliz haciendo lo que hace».

Sintiendo que a muchos votantes podría no gustarles la idea de que Kissinger sirva en la administración de Cain, su vocero afirmó más tarde que en realidad Cain nunca se lo consultó a Kissinger, según reporta Yahoo News. J.D. Gordon dijo que su jefe “tenía sueño” durante la entrevista con el periódico de Milwaukee.

A pesar de la retractación y pobre excusa, Cain y Kissinger se han reunido frecuentemente en el pasado para hablar sobre política exterior. Cain ha enlistado a Kissinger como una de sus influencias claves en política exterior.

Demostrando que la administración de Cain sería casi idéntica a la administración de Bush, el ex director ejecutivo de Godfather’s Pizza dijo que también admira al neoconservador John Bolton. Además, declaró que tiene un ojo puesto sobre el senador de South Carolina, Jim DeMint, y el parlamentario de Wisconsin, Paul Ryan.

Kissinger apoyó previamente a Barrack “Barry” Obama. También engañó fácilmente a los demócratas, ahora indignados por el hecho de que la política exterior de Obama es una extensión de la política exterior de George W. Bush.

Sirviendo bajo Nixon y su sucesor, Gerald Ford, Kissinger actuó como uno de los criminales de guerra más remarcables de la historia. Facilitó el bombardeo ilegal de Camboya durante la guerra de Vietnam. Trabajó tras la escena con la CIA para instalar en Chile al brutal dictador Augusto Pinochet, y fomentó la represión política en tal país. Impulsó la invasión turca de Chipre y dio luz verde a la invasión indonesia a Timor Oriental.

Kissinger es un viejo miembro de Bilderberg. De hecho, es una pieza instrumental en aquella organización elitista junto a David Rockefeller y otros banqueros y globalistas.

Significaría una adición clave en la administración de Cain, al igual que Bolton, quien sin duda acompañará a un séquito de neoconservadores y otros propagandistas bélicos decididos a fomentar la eterna lucha contra el Islam.