De las cenizas de la crisis, ¿los «Estados Unidos de Europa»?

Por toda Europa, los titulares anuncian que la eurozona está al borde del colapso. Muchas personas suponen erróneamente que esto significa el fin del euro y el regreso a las monedas nacionales. Desafortunadamente, ese no va a ser el caso en absoluto. En cambio, será otro ejemplo de cómo la élite intentará instaurar el orden a través del caos. La elite europea no tiene ninguna intención de renunciar a una Europa unida. Por el contrario, tiene la esperanza de ser capaz de dar vida a unos nuevos «Estados Unidos de Europa» de las cenizas de eurozona ya existente.

En los próximos meses veremos pánico y temor por toda Europa. El euro probablemente se hundirá como una piedra, y es probable que haya grandes problemas financieros en Europa y en todo el mundo. Pero para la élite europea, una gran crisis como esta representa una oportunidad de oro para derribar las estructuras existentes y construir otras nuevas. La solución que la élite europea impulsa no es volver a la forma que Europa solía tener. Por el contrario, impulsa la idea de una Europa mucho más estrechamente integradas.

Por supuesto, no se llamarán los «Estados Unidos de Europa», aunque eso es definitivamente lo que tienen en mente.
Pero ellos saben que los pueblos de Europa nunca aceptarían esa solución, a menos que antes sientan el miedo y el dolor suficientes.

En este momento, se está preparando el escenario para crisis financiera que se avecina en Europa. Por toda la Unión Europea, los medios de comunicación tienen a los europeos preparados para esperar lo peor. Por ejemplo, lo siguiente proviene de un artículo en el Telegraph:

El colapso de la eurozona podría causar un crash que de inmediato acabaría con la mitad del valor de la economía europea, sumiendo al continente en una depresión tan profunda como la caída de 1930, advirtió el presidente de la Comisión Europea.

Algunos periódicos incluso advierten que se avecina un «Armagedón» financiero. Sólo lee el siguiente extracto de un artículo en el Express:

Se está preparando la última noche de la ruptura del euro como la crisis de deuda en Europa fuera de control.

Mientas los funcionarios del Tesoro trabajaron toda la noche para suavizar el impacto en el Reino Unido, David Cameron advirtió de que la moneda única europea se enfrenta a su «momento de la verdad».

El Secretario de Comercio, Vince Cable, fue más allá y habló de «Armagedón», mientras funcionarios de Bruselas advirtieron que el caos amenaza con sumir a todos en una nueva recesión.

Aunque no lo creas, muchos de la élite europea en realidad pueden estar esperando el colapso de la actual estructura de la eurozona.

¿Por qué?

Bueno, les dará la oportunidad de implementar algo nuevo.

Una crisis financiera sólo es temporal, pero muchos en la élite europea creen que pueden construir una «nueva Europa», que podría sobrevivir durante años

Medios de prensa de toda Europa ya están informando sobre los rumores de que el presidente francés, Nicolás Sarkozy y la canciller alemana, Angela Merkel, han estado «conspirando en secreto» para crear una «nuevo eurozona», que excluya a algunos de los países más débiles como Grecia e Italia.

Por ejemplo, lo siguiente es de un artículo que acaba de salir en el Telegraph:

Francia está elaborando planes para crear una organización disidente de países de la eurozona con su propio tratado, Parlamento y sede – una medida que podría debilitar significativamente a la actual Unión Europea.

El mismo artículo del Telegraph también está preparando a los lectores a aceptar que la solución definitiva a la venidera crisis financiera será «fortalecer la unión entre los países de la eurozona»:

Francia y Alemania comprenden que quieren fortalecer la unión entre los países de la eurozona con nuevos impuestos y medidas legales para prevenir que las naciones presten y gasten demasiado en el futuro.

Pero lo que no se dice en estos artículos es que Alemania y Francia no tienen ninguna intención de excluir a nadie en el largo plazo. Ellos sólo quieren que algunos de los países más débiles tengan miedo de ser «excluidos» del «nuevo club» para que acepten una Europa mucho más integrada y todas las nuevas reglas del plan que Alemania y Francia quieren imponer.

Recuerda mis palabras. Los países económicamente más débiles, como Italia y Grecia finalmente se unirán al nuevo «bloque económico» que Alemania y Francia están estableciendo.

Pero antes de que ocurra todo eso, se permitirá que muchos de estos problemas de la deuda en Europa se desarrollen, el euro probablemente va a hundirse como una roca, y al caos se le permitirá reinar en todo el continente durante un corto período de tiempo.

La dura y fría realidad del asunto es que la estructura actual de la eurozona simplemente no funciona y nunca debió haber existido en primer lugar. Un artículo reciente publicado en Crackerjack Finance resume muy bien algunos de los problemas de la actual estructura de la eurozona:

Los problemas de la construcción defectuosa de la eurozona han sido expuestos completamente. Un bloque de 17 naciones soberanas ha adoptado una moneda común y subyugado su política monetaria a un banco central común. Sin embargo, cada una de las 17 naciones soberanas tiene ventajas comparativas, industrias, niveles de deuda, tasas de interés, déficit presupuestario, reglas del mercado laboral y políticas fiscales diferentes. Reflexionando sobre todas las diferencias, es sorprendente que la eurozona haya sobrevivido bajo su constitución actual durante más de una década.

Pero en lugar de regresar a las monedas nacionales, la élite europea están convencida de que llegó el momento de unos «Estados Unidos de Europa» que sean mucho, mucho más integrados.

Un artículo en The Guardian citó recientemente a Angela Merkel señalando que la solución a los problemas que enfrenta Europa va a «significar más Europa, no menos Europa»:

Angela Merkel, la canciller alemana, dijo que la situación se había vuelto «desagradable», e instó a los miembros de la eurozona a acelerar los planes para una mayor integración política. «Es momento de un gran avance para una nueva Europa», dijo. «Debido a que el mundo está cambiando tanto, tenemos que estar preparados para responder a los desafíos. Eso significa más Europa, no menos Europa».

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha sido aún más audaz en sus llamados a «unir» Europa:

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, realizó un nuevo llamado a la UE para «unirse o enfrentarse a la irrelevancia» a raíz de la creciente crisis económica en Italia. «Estamos siendo testigos de cambios fundamentales en el orden económico y geopolítico que me han convencido de que Europa debe avanzar ahora en conjunto o arriesga la fragmentación. O Europa se transforma o caerá. Estamos en un momento decisivo en el que o nos unimos o enfrentamos la irrelevancia», dijo.

Para facilitar este proceso, por toda Europa se ha instalado a nuevos políticos que sean simpatizantes de la agenda de la «Europa unida» de la élite europea.

En Italia, Silvio Berlusconi se ha ido, y al parecer será reemplazado por el economista Mario Monti.

Monti estudió en Yale, es miembro de la Comisión Europea, presidente de la Comisión Trilateral en Europa y también miembro del Grupo Bilderberg.

En Grecia, George Papandreou se ha ido, y Lucas Papademos ha sido instalado en el poder.

Papademos fue profesor en Harvard, y anteriormente se desempeñó como gobernador del banco central griego, vicepresidente del Banco Central Europeo y economista senior en el Banco de la Reserva Federal de Boston. También es miembro de la Comisión Trilateral.

Es curioso cómo la gente de las mismas organizaciones elitistas siempre terminan en los puestos de poder, ¿verdad?
Con hombres como estos a cargo, será mucho más fácil para la élite europea conseguir que el resto del continente haga la transición hacia la «nueva Europa».

¿Pero a qué se parecerá esa «nueva Europa»? Bueno, un artículo del Daily Mail de hace algún tiempo, titulado «El ascenso del Cuarto Reich, cómo Alemania está utilizando la crisis financiera para conquistar Europa», donde aparece esta aleccionadora evaluación de lo que una mayor integración económica significaría para Europa:

Esto implicaría una pérdida de soberanía que no se veía en esos países desde que se encontraron bajo la bota militar del Tercer Reich hace 70 años.

Para no tener duda alguna de lo que significa la unión fiscal: se trata de una única política económica, un único sistema de impuestos, un único sistema de seguridad social, una única deuda, una única economía, un único ministro de finanzas. Y todo lo anterior sería alemán.

Eso no suena bien.

Pero eso es lo que la élite siempre desea.

Siempre desea tener más poder y más control.

En este momento, los pueblos de Europa no están dispuestos avanzar con el asunto de la «nueva Europa».

Lo que significa que antes tendrán que sufrir un montón de caos, dolor y sufrimiento.

Un colapso financiero sin duda llegará a Europa.

Va a ser tremendamente desagradable.

Pero una vez este haya terminado, la élite europea tiene la esperanza de obtener finalmente lo que siempre ha querido – una «nueva Europa», es decir, más integrada de lo que había sido en ningún momento desde la caída del Imperio Romano.